viernes, 26 de noviembre de 2010

EL SER MAESTRO


El ser se educa tanto desde lo social como lo individual y esto se da en dos momentos; cuando aprende lo teórico y cuando llega a la práctica por medio de experiencias que ponen a prueba sus saberes con el contexto. Construir y fortalecer la profesión docente se da a partir del dominio del campo de conocimiento y se va aprendiendo y desaprendiendo en la práctica diaria de cada docente teniendo como una herramienta primordial la reflexión critica y constructiva.

Desde esta perspectiva la docencia se percibe como un proceso facilitador de los aprendizajes, y esta no es una carrera como tal, es una formación inicial por que a lo largo de estar jugándose en ese papel con sus alumnos de aprender a aprender se enriquecen saberes y se va aprendiendo; es decir el docente se va formando en su campo cuando permite un intercambio de saberes con el medio, con el alumno y con él mismo estableciendo vínculos que fortalecen los aprendizajes.

La socialización de experiencias pedagógicas, la producción y el desempeño del docente ayudan a la resignificación del aprendizaje cuando el maestro asume su rol de manera muy consciente, comprendiendo que la reflexión en y sobre la practica contribuye al desarrollo personal e individual sin dejar del lado la evaluación y el desarrollo colectivo; de esta manera adquiere un empoderamiento en sus desarrollos permitiendo formar en sus alumnos sujetos reflexivos y autónomos.

Se cree que un modelo de ser docente varía mucho, por que muchos modelos pueden ser validos, la tarea se centra buscar el estilo más adecuado de acuerdo a las características personales de cada uno y teniendo en cuenta el alumno que encontramos hoy en día. Un baño de humildad y un despojo de actitudes y posiciones rígidas e ideologizadas conducen a un modelo de maestro que se desempeñe en los contextos de sus alumnos.

Para una buena clase es necesario que lo transmitido y explicado sea entendido por el alumno, que el maestro haya sabido mantener y estimular la atención de sus aprendices dándoles a entender el sentido de lo que se esta trabajando permitiéndoles que sean capaces de relacionar lo nuevo con los conocimientos previos promoviendo la formulación de preguntas que estimulen la investigación y la reflexión.

Para ser un buen maestro es necesario saber lo que va atrabajar y que este bien preparado, además que sea claro y ordenado en lo que quiere transmitir, que sea abierto al cambio para atreverse a explorar su entorno ya sea social, cultural etc., en equipo con sus estudiantes, también estimular la participación de ellos y ponerse en el lugar de ellos permitiendo ser accesible en el momento que lo necesitan; el trabajo en equipo, colaborativo y cooperativo deben primar en su clase. Éste requiere Producción, investigación, registros de prácticas y a partir del análisis de esas investigaciones y registros se genera una nueva actitud que permite mejorar y crear entornos que promueven la cooperación, soporte emocional y crecimiento personal en el proceso del trabajo conjunto.; es decir aprender de su entorno.

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